Mi estancia en Mari Hostel fue genial. La cama era muy cómoda y pude descansar muy bien. Además, las literas eran geniales y la limpieza del lugar era impecable. El personal también fue muy bueno y amable, me hicieron sentir como en casa. Incluso pude conocer a otros viajeros y hacer vida en familia. Tenían bicicletas y guitarras disponibles, lo cual fue genial. ofrecían un desayuno gratuito y el WiFi tenía buena cobertura. En resumen, recomendaría este lugar sin ninguna duda.

Aunque tuve una estancia positiva en general, hubo algunos inconvenientes. Por ejemplo, había un pub inglés en frente del hostel que ponía música muy alta hasta altas horas de la noche, lo cual dificultaba conciliar el sueño.

El personal fue super amable y servicial, nos ayudaron a organizar nuestro transporte hacia otra ciudad en la madrugada. El hotel estaba muy limpio y cómodo, con excelentes instalaciones como cocina y zona chill out para fumadores. había lavadora y secadora sin coste adicional. Disfrutamos de un buen desayuno y cada noche había proyección de películas, creando un ambiente agradable. Los dormitorios eran perfectos y la relación calidad-precio era estupenda. Además, el hotel estaba cerca de la zona de arte callejero y nos sentimos como en casa.

Que no pude quedarme más tiempo.

El staff fue más que amable, ¡fue increíblemente amable! El hostel estaba impecablemente limpio y muy cómodo. Tenían un desayuno delicioso y una cocina totalmente equipada. Además, tenían una sala super cool para fumadores, lavadora y secadora gratis, y proyectaban películas todas las noches. Los dormitorios eran perfectos y la relación calidad-precio era estupenda. También, estaba cerca de una zona con arte urbano y me sentí como en casa. ¡Sin duda alguna volvería, fue una experiencia asombrosa!

Lugar acogedor, personal simpático, amplias zonas comunes, buen desayuno gratuito, buenas instalaciones.

No me puedo quejar de nada.

La estancia en Mari Hostel fue increíble, incluso mejor que la vez anterior en Ipoh. Las camas eran súper cómodas y dormí genial las dos noches que estuve. El personal era excelente, muy amable y servicial. me encantó que tuvieran secador de pelo disponible.

desayuno pobre, no había mantequilla para las tostadas y el café era realmente malo.

Lo mejor del hotel fue la amable recepción y el personal servicial. Me ayudaron con todas mis preguntas y me dieron recomendaciones útiles sobre lugares para visitar. La sala común era espaciosa y tenía información turística en las paredes. me gustó la opción de alquilar bicicletas y el ambiente animado. Además, el hotel estaba limpio y cómodo. ¡Me sentí como en casa!

El lugar es cómodo y las camas son fantásticas. Me tocó una habitación solo para mujeres, lo cual me pareció genial. La música del hostel es la mejor y también ofrecen alquiler de bicicletas.

El menú del desayuno podría ser mejorable, en general se quedaba sin papel higiénico en el baño.

El personal fue muy amable y atento durante mi estancia. Además, el hostel estaba limpio y confortable, con desayuno incluido y una zona chill out para fumadores. me gustó que ofrecieran lavadora y secadora sin ningún costo adicional. Por otro lado, la ubicación del hostel era conveniente, cerca de la zona de las artes callejeras y a unos 20 minutos a pie de las atracciones de la ciudad.

Me encontré con algunos inconvenientes durante mi estadía. En general, el baño se quedaba sin papel higiénico y no había ningún lugar donde apoyar mis cosas mientras me duchaba.

Una delicia despertar cada mañana y disfrutar de un delicioso desayuno gratuito. El cafe y el aroma a té se apoderaban del área común como si fueran una banda de rock en el escenario. Era casi tan emocionante como ir de compras a Aeon Station 18. Además, el área común era tan espaciosa que parecía un campo de juego para gigantes. Sin duda, fue el lugar perfecto para relajarse después de un agotador día de turismo, como si estuviera en mi propio cine privado con un proyector mágico.

Sin tomas de corriente suficientes.

Una vez que llegué al hostel, lo primero que me llamó la atención fue el amplio y espacioso lobby con una chimenea. Era como entrar a un acogedor salón de una casa de campo. Me sentí muy cómodo y relajado, era el lugar perfecto para descansar después de un largo día de viaje.

Escasez de papel higiénico.

Lugar acogedor, personal simpático, amplia sala común, desayuno gratuito, buenas bicicletas, WiFi fuerte.

Nada, es perfecto.

Cómodas camas, personal amable, ambiente agradable, zona de cocina, recomendaciones útiles, baños limpios.

Todo fue genial.

El personal es muy amable y servicial, siempre dispuesto a ayudarte en lo que necesites. La ubicación del hotel es tranquila y cerca de paradas de autobús, lo que facilita moverse por la ciudad. Además, el hostel cuenta con un restaurante en la planta baja, donde puedes registrarte y pedir información adicional.

No hay desayuno incluido en la estancia, pero se cuenta con café y té gratuitos durante todo el día.

Mi hotel favorito en Ipoh es una estancia imprescindible. Desde mi primera visita, el personal me asesoró con amabilidad sobre el cambio de divisas. Ofrece Wi-Fi gratuito, aparcamiento, aire acondicionado y desayuno. ¡Ya estoy emocionado por regresar en Navidad!